ÁREAS PROTEGIDAS | POLÉMICA POR LA CONSTRUCCIÓN DE UN SALÓN DE USOS MÚLTIPLES EN LA RESERVA LAGUNA DEL DIABLO



  • La Municipalidad de Ushuaia comenzó a construir un salón de usos múltiples en la reserva natural
  • Vecinos y vecinas del barrio rechazan el proyecto y temen por posibles daños al ambiente y al paisaje
  • Funcionarios municipales se reunieron con vecinos y vecinas que iniciaron una petición para detener el proyecto

La Laguna del Diablo es una Reserva Recreativa Natural ubicada dentro del ejido urbano de la ciudad de Ushuaia, en el barrio Andino. Históricamente esta pequeña laguna, rodeada de bosque nativo, ha sido utilizada para diversas actividades, en especial el patinaje sobre hielo durante la temporada invernal. El espejo de agua y su bosque circundante tienen un particular vinculo con los vecinos y vecinas del barrio, muchos de los cuales pasaron su infancia jugando en sus orillas. En noviembre del año 1991, a través de la ley 487, la por aquel entonces Legislatura del Territorio Nacional de la Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, crea la reserva con el objetivo de preservar el ecosistema de turbera en el ejido urbano de la ciudad, como así también el sector de bosques de lenga que cumple una importante función como pulmón verde.

Lamentablemente desde hace unos cuantos años el sector se encuentra muy deteriorado. Tras el incendio, en el año 2016, del antiguo refugio que administraba el Club Andino de Ushuaia, la infraestructura montada en los márgenes de la laguna se deterioró considerablemente debido a la falta de mantenimiento. Ahora, tras años de abandono, la Municipalidad de Ushuaia ha decidido realizar obras en el lugar, con la intención de brindar nuevas posibilidades de uso a la reserva natural. Sin embargo, a pesar de haber reclamado durante mucho tiempo por el mantenimiento de la Laguna del Diablo, un nutrido grupo de vecinos y vecinas ha expresado un profundo descontento en relación a esta obra y han iniciado una petición (que al momento de redactarse este artículo ya había recolectado alrededor de 3000 firmas) en la cual rechazan la construcción del salón y manifiestan que estas obras ponen en peligro a la reserva.



No a la destrucción de la reserva Laguna del Diablo” es el título de la petición que en pocas horas se volvió viral en las redes de Ushuaia (ver), en la cual los autores manifiestan que “se están violando todos los códigos urbanos”, ya que según ellos “La Municipalidad, ha pasado de la indiferencia, al desarrollo de un megaproyecto con grave impacto ambiental, sin ningún tipo de evaluación previa”. Según manifiestan los autores de la petición, no se ha realizado la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) y la Evaluación del Impacto Visual y Paisajístico (EIVP) que exige la ordenanza municipal 4124 y sostienen que dicha edificación perjudica el paisaje y el entorno de la laguna.



Desde el municipio es poca la información que se ha brindado sobre este proyecto, y la falta de claridad sobre el propósito de dicha construcción es uno de los factores que ha provocado la alarma de los vecinos y vecinas de la laguna. Según las escuetas publicaciones de la Municipalidad de Ushuaia, las cuales vienen acompañadas con una imagen generada por computadora que ilustran lo que será la edificación, se pretende construir un salón de usos múltiples que podrá ser aprovechado como refugio, sitio para dar clases, instalaciones de personal de seguridad, etc. Sin embargo en la petición los autores afirman que “solamente necesitamos limpieza del predio, seguridad por las noches, una vereda que la rodee y mejora del muelle para los kayaks que allí practican en verano, como así también un pequeño refugio que no dañe ni perjudique tanto la emblemática vista a la laguna como la biodiversidad que allí se encuentra”.



En vista de la repercusión de la petición, las autoridades municipales llevaron adelante una reunión con vecinos y vecinas para explicar el proyecto y escuchar las inquietudes. De dicho encuentro participaron el Jefe de Gabinete, Mario Daniele, la Secretaría de Planificación e Inversión Pública, Gabriela Muñiz Siccardi, el Director de Desarrollo Territorial, Máximo Lobo, el Vicepresidente del Instituto Municipal de Deportes, Guillermo Navarro, y el Secretario de Prensa, Nicolás Pelolli. Con respecto a la Evaluación de Impacto Ambiental, según la información publicada por los asistentes a dicha reunión, las autoridades informaron que "no es necesario (el estudio) ya que el lugar ya estaba impactado de antes". En dicha reunión se solicitó la paralización de la obra y las autoridades acordaron acercarse al sector el día 10 de febrero a las 17h para poder acordar con los vecinos, qué cambios se podrían llevar a cabo.



Abel Sberna

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